Y si llega el día...

Y si llega el día que el hacha implacable
se hunda en mi costilla yo no llorare
de sus embestidas soltare el anclaje
que enraicé en la tierra que quita mi sed
en mi deriva la arrogancia de mi copa perderé
y ya en el suelo consumada mi derrota
ni al viento amable lo perfumaré al pasar
ni en mis ramajes las criaturas anidaran
ya no habrá sombra que refresque al caminante en su andar.
Si es mi sino morir...
que le den a un ebanista mi desplome
y con el hagan la cruz de los ladrones
Si es mi sino morir...
den mis brazos a un carpintero de rivera
y con ellos que hagan remos a las pateras.
Saquen de mi el palo que aguante la vela al pescador,
la leña que al sintecho le da calor,
las vigas que al sur le soporten sus penas.
Si es mi sino morir...
que den mis entrañas al que no las tenga
y al que nunca luche que le den mi fuerza
verdugo si a matarme un dia llegas
da fe de lo que con savia te escribo
en mi corteza.

Escrito por Tino Tovar